Caña de Azúcar: la Variedad y su Efecto por Jesús E. Larrahondo, Ing. Qco, Ph.D.
El contenido de sacarosa, el proceso de maduración, el nivel de compuestos no-sacarosas y la morfología de los tallos, son características varietales que influyen directamente en la calidad de los jugos. Es difícil hacer una clasificación rígida de las variedades de acuerdo con su contenido de sacarosa; no obstante, existen marcadas diferencias entre ellas y, a menudo, se denominan variedades precoces o tardías, ya sea que a una edad temprana alcancen un contenido alto o bajo de sacarosa, respectivamente. La maduración es el proceso de acumulación de la sacarosa en el tallo y para que ocurra es necesario que se presente una disminución en la celeridad del crecimiento, que favorezca la acumulación de los azúcares producidos durante la actividad fotosintética.
La dureza de la corteza es una característica importante de calidad en las variedades de caña, ya que constituye un obstáculo para el avance del insecto-plaga conocido como barrenador. La población de tallos es otra característica varietal que tiene incidencia en la calidad; inicialmente aparecen los tallos primarios, y entre 4 y 8 semanas más tarde brotan de los nudos de éstos 1 o más tallos secundarios. Algunos tallos secundarios crecen en forma adecuada, pero otros crecen débiles y mueren entre 5 y 9 meses de edad. Entre 8 y 10 meses aparecen los primeros ‘‘chulquines’’ o ‘‘mamones’’, que se reconocen con facilidad por ser tallos de mayor diámetro y de crecimiento rápido y erecto, siendo comunes en la variedad POJ 2878 cuando sufre volcamiento, lo cual favorece una mayor exposición a la luz y ayuda a promover el desarrollo de aquellos.
En la época de molienda, a los 12 meses de edad aproximadamente, la madurez de los chulquines es un factor importante que afecta la calidad; así, en la variedad POJ 2878 cosechada entre 12 y 15 meses, se han observado disminuciones significativas en la pureza de los jugos y en el azúcar recuperable o rendimiento estimado de azúcar (ARE), cuando la población de aquellos es alta. Por el contrario, en cultivos con 2 años de edad, los chulquines están completamente maduros y contribuyen de manera significativa en el rendimiento.
Algunas características morfológicas de los tallos como la forma, el diámetro y el color, que influyen en la calidad, cambian con las variedades. Se sabe que las condiciones de desarrollo del cultivo tienen un mayor impacto en la longitud de los entrenudos que en el diámetro de los tallos de la planta. La forma de los tallos tiene especial importancia debido a la introducción de la cosecha mecanizada. En los países donde se cultiva caña de crecimiento erecto, las cosechadoras y las alzadoras mecánicas realizan una labor eficiente y envían a la fábrica caña relativamente limpia, evitando, de esta manera, la reducción en la pureza de los jugos y en el rendimiento en sacarosa; así, por ejemplo, en Queensland, Australia, las dificultades para la cosecha mecánica condujeron a la selección de variedades erectas con buenos tonelajes y alta sacarosa (Meade y Chen, 1977).
En la época de molienda, a los 12 meses de edad aproximadamente, la madurez de los chulquines es un factor importante que afecta la calidad; así, en la variedad POJ 2878 cosechada entre 12 y 15 meses, se han observado disminuciones significativas en la pureza de los jugos y en el azúcar recuperable o rendimiento estimado de azúcar (ARE), cuando la población de aquellos es alta. Por el contrario, en cultivos con 2 años de edad, los chulquines están completamente maduros y contribuyen de manera significativa en el rendimiento.
Algunas características morfológicas de los tallos como la forma, el diámetro y el color, que influyen en la calidad, cambian con las variedades. Se sabe que las condiciones de desarrollo del cultivo tienen un mayor impacto en la longitud de los entrenudos que en el diámetro de los tallos de la planta. La forma de los tallos tiene especial importancia debido a la introducción de la cosecha mecanizada. En los países donde se cultiva caña de crecimiento erecto, las cosechadoras y las alzadoras mecánicas realizan una labor eficiente y envían a la fábrica caña relativamente limpia, evitando, de esta manera, la reducción en la pureza de los jugos y en el rendimiento en sacarosa; así, por ejemplo, en Queensland, Australia, las dificultades para la cosecha mecánica condujeron a la selección de variedades erectas con buenos tonelajes y alta sacarosa (Meade y Chen, 1977).
Ref: Jesús E. Larrahondo
Ing. Químico, Ph. D., Jefe del Programa de Fábrica de CENICAÑA
Ing. Químico, Ph. D., Jefe del Programa de Fábrica de CENICAÑA
1 comentario:
esta terrible
Publicar un comentario
Bienvenido a Avibert.
Deja habilitado el acceso a tu perfil o indica un enlace a tu blog o sitio, para que la comunicación sea mas fluida.
Saludos y gracias por comentar!